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Botrytis en tomate: así puede afectarte si no tomas las medidas adecuadas


Botrytis en tomate: estrategias de prevención y control

Cultivo de tomate afectado por botrytis


Este es un caso real de botrytis en tomate con el que se encuentran miles de productores cada año. Tomemos el ejemplo de un agricultor que gestiona un invernadero de tomate en una zona de clima templado y que atraviesa por un período con unas condiciones ambientales de alta humedad relativa y temperaturas entre 15y 23oC. 

El agricultor no está ventilando bien el invernadero, por lo que se forman condensaciones que, lejos de reducir esa humedad ambiental, contribuyen a incrementarla. En ese escenario tenemos el primer caldo de cultivo para la aparición de una infección de podredumbre gris en tomate. Fungisei es una solución biofungicida de alta eficacia desarrollada por Seipasa para la prevención y control de enfermedades de alto impacto como la botrytis.

Aunque nos detengamos en este caso de botrytis en tomate de invernadero, estamos ante una enfermedad que también ataca a otros hortícolas, además de otros cultivos como la fresa, la uva o los ornamentales. La botrytis es un viejo conocido de los agricultores. Se trata de un hongo patógeno que puede aparecer en cualquier fase del ciclo del cultivo y que puede afectar a todas las partes de la planta: tallos, hojas, nuevos brotes, flores y frutos.

La podredumbre gris, la forma común de referirse a esta enfermedad, limita la producción y reduce la calidad de las cosechas. Las esporas tienen la capacidad de sobrevivir en superficies vegetales incluso en ausencia de condiciones favorables, por lo que es urgente la eliminación inmediata de las plantas o frutos afectados. 

Medidas de prevención contra la podredumbre gris

La botrytis también tiene la capacidad de propagarse muy rápidamente: las esporas germinan en el área infectada y se introducen en los tejidos de las plantas sanas. Lo pueden hacer a través de cualquier pequeña herida provocada por la poda, la acción de los insectos o las condiciones climatológicas adversas que incluyen lluvia o granizo. Si las condiciones ambientales son las que describíamos en la introducción del artículo, el riesgo de aparición de la enfermedad es todavía mayor. 

Hay que ser especialmente cuidadosos en la ventilación de las instalaciones y en las tareas de poda. La prevención de la podredumbre gris también obliga a ser muy vigilante en las revisiones visuales de las parcelas para detectar posibles síntomas. Estos son bastante evidentes y van desde la aparición de deformidades y manchas color café en los bordes de las hojas, manchas de color amarillento o pardo en frutos e incluso una especie de moho aterciopelado de color gris.

Fungicidas para botrytis en tomate

Seipasa recomienda la aplicación de Fungisei para la prevención y control de botrytis en tomate. Se trata de un fungicida microbiológico con registro fitosanitario para el control de enfermedades de alto impacto. 

Está desarrollado a partir de una cepa de Bacillus subtilis de alta eficacia y pureza y cuenta con la tecnología patentada Furity capaz de: proteger al activo, asegurar su estabilidad y homogeneidad, y maximizar su capacidad de acción.

Gráfico 1.- Incidencia de botrytis en tomate.

El gráfico 1 muestra los resultados de un ensayo realizado en Marruecos sobre botrytis en tomate. Las conclusiones revelan la eficacia de Fungisei para controlar y reducir la incidencia de la enfermedad tras la primera aplicación. Además, el producto iguala la eficacia de la referencia química con la que se ha comparado

Fungisei posee un doble modo de acción preventivo y curativo. La potente implantación del microorganismo le permite ocupar el espacio e impedir la instalación del patógeno. Este antagonismo funciona de forma preventiva. El segundo modo de acción tiene que ver con la inducción sistémica de resistencias en la planta, y es preventivo y curativo. Una vez instalado en la planta, el microorganismo activa el sistema defensivo de la misma y la ayuda a protegerse del ataque de los patógenos.

El tercer modo de acción también es curativo, ya que Fungisei genera antibióticos naturales, entre los que se encuentran los lipopéptidos, que destruyen la membrana del hongo fitopatógeno y provocan su muerte celular.

Inclusión en programas GIP

Fungisei es una solución autorizada para su uso en agricultura ecológica bajo la certificación UNE y constituye una herramienta idónea para su inclusión en programas de gestión integrada para el control de enfermedades con el objetivo de reducir la carga química de los tratamientos. Lo observamos en los resultados que arroja el gráfico 2, relativo al ensayo para el control de botrytis en tomate desarrollado en Alicante.

Se han realizado 6 aplicaciones en el intervalo de 6 a 9 días para comparar una estrategia convencional, con la presencia de tres materias activas de síntesis química, con otra estrategia mixta en la que se ha incluido Fungisei. En esta última, dos de las aplicaciones con materias activas de síntesis química se han reemplazado por aplicaciones de Fungisei con una eficacia superior a la de la estrategia convencional.

Gráfico 2: Porcentaje medio de frutos infectados con síntomas de botrytis (incidencia).

La reducción de la carga química dentro de la estrategia mixta ha sido de entre el 30 y el 78% en cada una de las tres materias activas de síntesis que se habían empleado. 

Además de por su eficacia, Fungisei destaca por su facilidad de uso. Es una fórmula líquida que se disuelve de forma rápida y sencilla sin necesidad de removerla en el tanque. No se separa en fases pasadas unas horas después de su aplicación en la cuba de preparación y tiene una amplísima compatibilidad con otros productos de síntesis y también con el cobre. Además, Fungisei no deja manchas o restos en el fruto tras el tratamiento y se puede aplicar el día antes de la cosecha porque no tiene plazo de seguridad.