El CAQUI, un ejemplo de diversificación de cultivos en la zona del Levante (III_primera parte)
En la comarcas de la Ribera del Júcar (provincia de Valencia) se siguen arrancando fincas de naranjos para sustituirlas por caquis, en concreto de la variedad “Rojo Brillante”, que se ha convertido en la “reina” del mercado en su modalidad de fruto duro, llamado comercialmente Persimon.
El caqui es una fruta tropical que se está imponiendo a otros cultivos en España, como el naranjo, por cuestiones de precio y rentabilidad. De hecho incluso el paisaje está cambiando en zonas como la comarca de la Ribera del Júcar (provincia de Valencia), antes claramente citrícola (entre los caquis y los frutales de verano, hay zonas en la que naranjos y mandarinos son ya minoría). Del mismo modo su cultivo se está extendiendo a otras regiones, como Murcia o Andalucía. En una década, ha pasado de ser un producto regional y con un mercado estrecho, a exportarse al centro de Europa y comenzar a popularizarse.
Y es que en la actualidad, el caqui es de los escasos cultivos que se mantienen en lo alto, mientras que otros, como la naranja, no paran de caer. Entre los aspectos más positivos del mismo, cabe destacar que se trata de un árbol que crece rápido y entra pronto en producción, el ciclo de cultivo es más corto que en los cítricos, los costes de producción son algo menores y, si se está dentro de una cooperativa, hay numerosas firmas comerciales interesadas.
Historia del caqui
Pero antes de seguir, retrocedamos un poco en la historia de esta fruta tropical. El caqui comenzó a cultivarse en el siglo VII en China, su país de origen, así como en Japón y Corea donde se encuentra en estado espontáneo. Está establecida su introducción en Europa entre los siglos XVII y XIX, cultivándose inicialmente como planta ornamental.
A mediados del siglo XX comienza a despertar un gran interés el fruto de este árbol, destinado en principio al autoconsumo, pero que empieza a encontrar también mercados reducidos tanto en España como en Francia. En consecuencia, algunos agricultores comienzan a efectuar pequeñas plantaciones de caqui, con las variedades comunes entonces: “Tomatero” en la zona de Segorbe (Castellón), “Picudo” (Costata) y “Cristalino” en la comarca de la Ribera Alta (Valencia).
Precisamente es en la comarca de la Ribera Alta donde en aquella época surge de manera espontánea una nueva variedad que ha supuesto una verdadera revolución en el cultivo del caqui en la Comunidad Valenciana, y sin lugar a dudas el inicio de uno de los ejemplos más sorprendentes de introducción de una fruta en los mercados en las últimas décadas. La variedad autóctona “Rojo Brillante” (en la actualidad esta variedad se puede encontrar en el mercado en sus formas Classic o Persimón. Tanto Classic como Persimón son en realidad la misma fruta/variedad, la diferencia reside en su punto de madurez: el classic se recolecta maduro y se comercializa tal cual, el persimón se recolecta semimaduro y ha de ser sometido a un tratamiento de ‘desastringentado’). La variedad ‘Rojo Brillante’ ha supuesto más del 98 % de las plantaciones comerciales de caqui en la Comunidad Valenciana durante los últimos 15-20 años, a la vez que en las provincias occidentales de Andalucía se consolidaba el cultivo de esta especie frutal alrededor de la variedad ‘Triumph’.
Como decíamos, el cultivo y comercialización de la variedad “Rojo Brillante” se limitaba a pequeñas producciones que tenían como destino los mercados locales y pequeñas exportaciones, principalmente al mercado francés. Por entonces, la forma de consumo del caqui de esta variedad se caracterizaba por presentar una pulpa de consistencia blanda, casi gelatinosa y de color rojo intenso. Si bien era muy apreciado por un pequeño número de consumidores, para la mayoría su desconocimiento, forma de consumo y excesivo dulzor era un freno para su popularización. También la comercialización de una fruta que se consumía con una consistencia tan blanda, complicaba bastante la cadena comercial.
Sin embargo, en el mercado también se venían comercializando otras variedades con una carne de consistencia firme, a pesar de ser algunas de ellas astringentes, al igual que la “Rojo Brillante”. La variedad astringente supone que cuando se recolecta con anterioridad a su plena madurez, con una consistencia dura y de color anaranjado todavía presenta un nivel de taninos que lo hace difícilmente consumible por resultar astringente al paladar. Por ello, para su comercialización se eliminaba la astringencia, lo que hacía que el caqui fuera comestible con una carne de consistencia dura, al igual que las variedades no astringentes (...)
Fuente: D.O Kaki Ribera del Xuquer(la próxima semana continuará este artículo sobre el caqui con la eliminación de la astringencia en la variedad 'Rojo Brillante' y la importancia de la promoción en la popularización de esta fruta tropical)