Herbicidas post-emergencia en cereal: tratamientos para potenciar su eficacia y ayudar a superar el estrés del cultivo
El uso de herbicidas de post-emergencia en cereal ocupa un lugar destacado dentro de los tratamientos aplicados a este cultivo. Durante la estación invernal, el cereal inicia la fase de ahijado. En esta etapa, el control temprano de las malas hierbas adquiere un papel relevante en todo lo relacionado con el desarrollo posterior de la cosecha.
La eliminación de malas hierbas es necesaria para para evitar una reducción de la cosecha con las consiguientes pérdidas de rentabilidad. Para ello, tan importante es la aplicación de las soluciones adecuadas que permitan conseguir la máxima eficacia de los tratamientos herbicidas en post-emergencia, como el uso de aquellas herramientas que ayuden al cultivo a superar el estrés provocado tras su aplicación.
Aunque la especie de mala hierba puede diferir de una zona a otra, existen ciertas variedades de gramíneas muy extendidas a lo largo y ancho de la península ibérica. Entre ellas se encuentra la ‘avena loca’ (Avena sterilis, A. fatua), que puede aparecer entre octubre y abril; el ‘vallico’ (Lolium rigidum), que germina con las lluvias más tempranas del otoño e inicia su nascencia antes de la siembra del cereal; o el ‘bromo’ (Bromus rigidus, B. diandrus), que también suele iniciarse con las primeras lluvias de la estación otoñal.
En estos y otros casos, el uso de herbicidas de post-emergencia en cereal es fundamental para el control y la eliminación de las malas hierbas. La aplicación de los herbicidas no siempre se realiza de forma independiente sino en combinación con otras soluciones. Foliplant es un producto de Seipasa específicamente recomendado para este momento fenológico en el cultivo de cereal.
La clave de las ventajas que aporta Foliplant reside en su formulación y en el equilibrio de sus elementos complejados. Su formulación aporta al producto una elevada eficiencia en la aplicación, ya que disminuye la tensión superficial, mejora la mojabilidad y la adherencia, y reduce la deriva. Todo ello incrementa la capacidad de absorción del Foliplant por vía foliar. De esta manera se facilita la entrada de materias activas sobre las malas hierbas cuando se aplican los tratamientos herbicidas de post-emergencia.
Herbicidas post-emergencia: superación del estrés
Asimismo, gracias a su formulación Foliplant ejerce una acción bioestimulante que ayuda a la planta de cereal a recuperarse del estrés generado tras la aplicación del herbicida. Foliplant aporta los aminoácidos y microelementos complejados necesarios para superar estos niveles de estrés, optimizando la absorción de nutrientes, mejorando el proceso de la fotosíntesis y permitiendo un desarrollo óptimo del cultivo.
Su aplicación en cereal aporta la energía necesaria para una mayor calidad y cantidad de la producción final de grano. Foliplant promueve las hormonas que facilitan el llenado del grano y favorece la correcta actividad fotosintética a partir del aporte de los elementos clave en la formación de clorofila y carbohidratos. Su uso también ayuda a la planta a resistir las temperaturas extremas y a mitigar las situaciones de estrés. Además, el aporte de microelementos como el Zinc es fundamental en la formación de auxinas, que contribuyen a la regulación del desarrollo y elongación del tallo y, en consecuencia, a generar una buena y resistente estructura de la planta.
Cuando se aplican herbicidas de post-emergencia en cereal, los tratamientos tempranos son los más recomendables por su mayor eficacia. En este punto, también se recomienda la aplicación de soluciones como Foliplant que, además de incrementar la eficacia de estos tratamientos, contribuye a conseguir un fortalecimiento y desarrollo óptimo de las plantas.