Pulgón de la lechuga: cómo controlarlo de forma rápida y eficaz

El pulgón de la lechuga es una de las plagas más habituales en este tipo de hortalizas. Su presencia varía en función de las condiciones climatológicas que se suceden a lo largo del año, de forma que la eliminación de esta plaga es necesaria para evitar daños estéticos y mermas en la producción. 

En todos los casos, se recomienda actuar tras la aparición de los primeros focos, ya que las poblaciones tienen la capacidad de reproducirse velozmente en pocos días. Además, su erradicación se complica cuando colonizan las partes internas de la lechuga. Pirecris es un insecticida natural diseñado por Seipasa para controlar el pulgón de la lechuga de forma rápida y eficaz.

Aunque la presencia del pulgón de la lechuga es más habitual en primavera, los factores asociados al cambio climático, con inviernos mucho más suaves, incrementan la posibilidad de su aparición en estaciones más frías. Su capacidad de reproducción y desarrollo se ralentiza con temperaturas inferiores a 10^o C, pero es mucho más rápida cuando las temperaturas superan los 20^o C.

En regiones más frías, el pulgón resiste el invierno en forma de huevo que eclosionará en la siguiente primavera mientras que, en los climas más templados, con inviernos mucho menos rigurosos, el pulgón puede llegar a sobrevivir en formas móviles adultas capaces de mantener su actividad reproductiva, de ahí la importancia de no bajar la guardia prácticamente en ningún momento del año.

Myzus persicae, Nasonovia ribisnigri y Macrosiphum euphorbiae suelen ser las especies más abundantes en el cultivo de lechuga. 

Síntomas y daños en la planta

Los síntomas de un ataque de pulgón en lechuga son sencillos de identificar por el arrugamiento de las hojas, las deformaciones en los brotes más jóvenes y las manchas de color amarillo o marrón que aparecen en los puntos más cercanos a las picaduras o succiones provocadas por los pulgones adultos. El pulgón de la lechuga también es un potencial vector de transmisión de diferentes virus vegetales a través de las melazas que segregan.

Aunque la colonización suele iniciarse de forma progresiva por las hojas exteriores hasta llegar al cogollo, si existen individuos adultos alados podemos encontrarnos con infecciones que llegan rápidamente a las hojas centrales de la planta, lo que dificulta el control de la plaga. Por tanto, tal como hemos subrayado al principio del artículo, la prudencia obliga a actuar de inmediato ante los primeros focos de infección, tanto si la planta es joven como si está próxima a formar cogollo. 

Insecticidas para el control de pulgón en lechuga

Pirecris es un insecticida natural desarrollado por Seipasa para eliminar de forma rápida y eficaz la presencia del pulgón de la lechuga. Se trata de un bioinsecticida que actúa con un potente efecto de choque y que presenta un plazo de seguridad muy corto, por lo que se puede aplicar frente a ataques producidos en estadios muy cercanos a la cosecha.

El gráfico 1 revela los resultados del ensayo realizado en España para evaluar la eficacia de Pirecris en el control de pulgón en lechuga (Nasonovia ribisnigri). Las conclusiones indican que con el bioinsecticida de Seipasa conseguimos controlar la plaga sin la necesidad de recurrir a ninguna solución de síntesis química. Pirecris detiene el ciclo vital de la plaga a partir del tercer día de aplicación e iguala la eficacia de la referencia química una semana después de la segunda aplicación.

Gráfico 1.- Evolución de la población de pulgón (Nasonovia ribisnigri) en lechuga.

La clave en la acción de Pirecris reside en su exclusiva formulación, gracias al perfecto equilibrio de las moléculas PI y PII que componen la sustancia activa, y que aportan la máxima eficacia insecticida, tanto al aire libre como en invernadero.

Las micromoléculas que componen su formulación condensan y generan una red estable y equilibrada en toda la disolución, y proporcionan una cobertura perfecta sobre la hoja y el insecto. Pirecris aporta un potente efecto insecticida que actúa bloqueando el sistema respiratorio del insecto hasta provocar su muerte. El producto actúa sobre huevos y larvas, reduciendo de forma muy significativa el número de nuevas generaciones.

En el gráfico 2 observamos la eficacia del producto para el control de otra especie de pulgón en lechuga, en este caso Myzus persicae, a través de un ensayo desarrollado en México. En este caso, además de controlar la plaga y reducir su incidencia a prácticamente cero tras el primer conteo, con Pirecris conseguimos igualar la eficacia de la referencia biológica (Piretrina 6%), aunque con una cantidad de ingrediente activo tres veces inferior.

Gráfico 2.- Evolución de la población de pulgón (Myzus persicae) en lechuga.

Pirecris es un bioinsecticida con registro fitosanitario contra trip, pulgón, mosca blanca o cicadélidos en un amplio rango de cultivos y países como España, Italia, Portugal, Grecia, Chipre, Francia, México, Colombia o Marruecos. Se trata, por tanto, de una solución con un amplio recorrido internacional, con experiencias y resultados en sistemas agrícolas muy diversos.