La aplicación de bioestimulantes enraizantes de última generación como Seiland® certifican el éxito en todo el ciclo productivo
El sistema radicular es el centro de mandos de una planta y lo que sucede en esta parte del vegetal va a definir el crecimiento y la productividad del cultivo. De hecho, es reconocida la relación directa entre las raíces y el desarrollo de la parte aérea: a mayor masa radicular, mayor grosor del tallo y más capacidad de traslocación, por lo que aumenta el área de las hojas favoreciendo la fotosíntesis y, por tanto, aumentando el calibre de los frutos.
En zonas sumamente condicionadas por la disponibilidad de agua y por ciertas técnicas de manejo del suelo que provocan su deterioro -especialmente en cultivos intensivos-, los vegetales precisan de un impulso natural adicional, no sólo que mantenga y potencie su crecimiento radicular, sino que lo haga en las mejores condiciones de sanidad vegetal.
La constante innovación en tecnología natural de la mano de empresas de referencia en el sector fitosanitario como SEIPASA, que cuenta con el sello Pyme Innovadora otorgado por el Ministerio de Economía y Competitividad, ha facilitado la disponibilidad de productos sumamente especializados que garantizan el buen desarrollo del cultivo en cada una de sus fases biológicas. En este sentido, para la primera etapa del ciclo del vegetal se ha logrado un bioestimulante enraizante de última generación que ejerce especial incidencia en las raíces y toda la rizosfera: Seiland®
Microorganismos beneficiosos
Aunque la temperatura, la humedad, la aireación, la resistencia mecánica del suelo, la nutrición, y las plagas y enfermedades son factores básicos que determinan la buena progresión del sistema radicular, el control de algunos de estos elementos es posible con el empleo de este completo bioestimulante.
Y es que Seiland® cuenta con una novedosa formulación que impulsa la actividad de los microorganismos benéficos que colonizan el nicho ecológico creando una barrera biológica y bloqueando patógenos, así como fortaleciendo el sistema defensivo de las plantas. De la misma manera, mejora su nivel nutricional y la riqueza del sustrato.
Su estudiada selección de compuestos bioactivos, ácidos orgánicos y aminoácidos garantiza la viabilidad del combo microbiano, además de estimular la generación de raíces laterales y pelos absorbentes que potenciarán el enraizamiento, la absorción de agua, la asimilación de nutrientes y, en definitiva, la mejora del vigor, color y calidad de los cultivos. La materia orgánica que contiene provee un mejor sustrato para aumentar la acción de las bacterias y los hongos que benefician el suelo.
Además, con el óptimo desarrollo radicular, Seiland® otorga al cultivo un mayor grado de resistencia al estrés.